El viento como recuerdos del alma.

El viento mese mi pelo como tus recuerdo mi alma. No hay bien que por bien no venga, dicen algunos. Yo no lo creo. Tardé dos segundos en conocerte; tres en enamorarme, tardé dos segundos en prometer olvidarte; tres en arrepentirme. Mi meta no es el pasado, es la calma interior, tener lo que quiero y querer lo que tengo. Siempre supe que eras un barco velero que no tenía ruta concreta, siempre buscabas aventuras y diversión, sin pensar que en mí encontrarías lo que no esperabas; el amor. Tu orgullo se hizo fuerte, tu debilidad estaba en mis manos y el miedo invadió tu cuerpo como látigos a mi corazón al saber que no querías admitirlo. Yo no imaginé un final definitivo, el destino está escrito y quiso separar los caminos. Permanerá algo de ti en mi vida, no sé si tu voz diciendo buenos días y buenas noches, no sé si tus besos imaginarios, no sé si la pasión que un día me confesaste, no sé si tu verdad en forma de mentira que quisiste que creyera, pero estás presente. Ahora sé que por mucho que duela la ausencia, tengo que caminar con paso firme, pues tú no merecías mi amor, pues tú merecías sentirte culpable. Me perdiste y sé que eso lo sabes bien y no te gusta nada la idea de que no halla ido en tu busca, pero recuerda que no soy yo quien falló, no soy yo quién debe rogar perdón. A pesar de todo, pido que por mí jamás sientas lástima. Siéntela por quien miente, por quien juega con los sentimientos, por quien no tiene el valor de enfrentar lo que quiere, si de verdad tienes que sentir pena, siente pena por ti. Yo a pesar de todo, estoy bien, mi felicidad no depende de dos palabras insípidas como es el "TE" y el "QUIERO" porque no quiero que me quieras, y yo quiero querer a otra persona. Solo piensa, que tienes una flor , pudiendo haber tenido un jardín, un jardín que marchitaste con tus actos y que ahora no quiere renacer. No es reproche, no es orgullo, es decir que nadie pondrá en su boca su amor, no como yo. Lamentarás que me halla ido, porque lo nuestro quedó en el aire, el aire que en forma de viento remueve también tu pelo, como los recuerdos tu alma.